domingo

No hay nada que decir.

Usen su pequeña gran imaginación e imaginen que hablan conmigo en la vida real... ¿Ya? Normalmente siempre hay algo que decir, música, libros, televisión o bromas babosas ¿Qué pasa cuando en realidad nunca hay nada que decir? Se vuelve entonces un:

Silencio incómodo...

Cuando a lo lejos sólo oyes un... cri cri cri.

De eso se trata este post... nada.
*
*
*
*
*
*
*
*
Disculpen, mi cerebro no da para más.


Aún así se que me seguiran amando
y comprenderán mi flojera porque todos
la hemos sentido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bla bla bla...